Lo que hacen estas redes es facilitar lo que hacíamos los críos al salir de clase, intercambiando cintas que nos grabábamos los unos a los otros con los primeros doble pletina. El problema es que ahora se hace a escala platenaria y con todo tipo de archivos. En las redes de intercambio se puede encontrar prácticamente de todo, desde poemillas y folletines infumables cuyos autores ponen a disposición de la humanidad hasta los más caros programas informáticos.
La piratería sin duda perjudica a muchas empresas y autores. Por otro lado, las redes de intercambio están generando nuevos consumidores, que descargan las últimas novedades, las escuchan y, si les gusta, corren a las tiendas a comprar aquello que les interesa. Criminalizar esta tecnología hasta la fecha no ha servido de nada. Tal vez habría que buscar otros caminos.
Las redes P2P pueden ser declaradas responsables de piratería en EEUU - elmundo.es
File-sharing beat goes on - USA Today
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