Un 30%. Pasa de 9,99 a 6,99 euros por disco. El precio sigue siendo caro pero ya empieza a acercarse a la lógica. Tras tantos años convenciéndonos de que comprábamos soportes (cuanto más gordo es un libro más caro, cuanto más chula la caja del disco...) ahora va a costar acostumbrar al público a pagar por el contenido. Tanto más cuando cada vez se tienen menos escrúpulos a la hora de descargar y descargar sin más. En cualquier caso, la mayoría de los amantes de la música están perfectamente dispuestos a pagar por lo que escuchan, siempre que los precios sean razonables.
Universal baja el precio de su catálogo en internet - CincoDias.com
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